Tres secretos para vivir mejor

En el manual de instrucciones que nos dejó el Maestro encontramos la fórmula para vivir mejor y nada más bueno que darle una revisión al comienzo de un nuevo año. El evangelista Mateo registró en el Cap. 11:del 20 al 30 tres secretos para que nos vaya mejor en el 22

  1. No recibas un milagro sin arrepentimiento.
    Dos ciudades donde Jesús realizó más milagros llamadas Betsaida y Corazin reciben una terrible palabra de juicio. En aquel día será más tolerable el castigo para otros pueblos considerados universalmente como bárbaros y degenerados. La razón es que ellos no tuvieron la oportunidad de ver tan excelente ministerio en acción haciendo milagros y maravillas.
    Betsaida y Corazin recibieron el milagro, más no se arrepintieron de sus pecados. Escucharon el mensaje, pero no recibieron al mensajero. Aprovecharon la ayuda temporal y despreciaron el mensaje eterno de salvación.
    Si quieres que te vaya mejor en este 22 empieza con arrepentimiento de tus malos actos. Tu sabes cuales y Dios los conoce también. No camines este nuevo año con esa maldad a cuestas, ríndete Jesús el té ama, te perdona y te limpia con su sangre.
  2. No camines por la vida sin revelación.
    Jesus alzó su voz para alabar al padre por haberle revelado el plan de salvación a los “niños” y habérselo escondido a los “sabios e inteligentes” . La mayor luz que hombre alguno pueda recibir, el más grande secreto que se nos pueda develar es comprender el plan divino de salvación. El que descubre que Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores y que todos aquel que en El cree es salvo, ya la hizo. No se requiere ser sabio para entender esta gran verdad, se demanda sencillez y fe. Jesus dijo yo soy la luz del mundo, el que me sigue no andará en tinieblas. Pon tu fe en Jesús, avanza cada día tomado de su mano, humíllate ante el cada mañana para recibir la iluminación necesaria en tu diario caminar. No sigas adelante sin El.
  3. No continúes por la vida llevando cargas que no puedes cargar.
    Venid a mi todo aquel que está cargado y cansado y yo os haré descansar. Dijo Jesús. Y añadió: llevad mi yugo sobre vosotros y porque ligero es mi yugo y ligera mi carga.

El descanso que tanto necesita nuestra alma, se encuentra en dos acciones nuestras: venir a Jesús y llevar su yugo.
Como humanos buscamos en diferentes lados aquello que nos dé descanso para el alma. Vamos por el mundo cargando emociones, recuerdos, pecados y maldiciones que se acumulan en la vida para hacernos difícil y pesado nuestro andar. Es por eso que existen tantas clínicas terapias y métodos que prometen aligerar el peso. Más ayudan poco o nada. Sin embargo el llamado de Jesús es claro: vengan a mi yo los perdono para que su carga sea ligerita.
La otra acción recomendada no es menos importante: lleven mi yugo. Jesus ofrece un yugo diferente y liviano.
El llamado es a seguir sus pisadas, a perdonar a amar y servir sin interés, sabiendo que de El viene la recompensa. Eso es llevar su yugo.

Arrepentimiento, revelación y la carga liviana serán los tres elementos que no deben faltar en nuestra vida para un exitoso 2022.

Te desafío a ponerlo en práctica.

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