
Reviviendo el valle de los huesos secos. Ezequiel 37.
En esta visión profética de Ezequiel encontramos varios elementos interesantes que nos sirven de clave para generar vida sobre cualquier circunstancia, que enfrentemos.
- poder del pensamiento
Vivirán esos huesos? Vr.3
Dios inicia un diálogo con una interrogante.
El propósito divino era despertar la imaginación del profeta.
Todo comienza en nuestro pensamiento, por eso debemos estar vigilantes.
Satanas sembró una idea en la mente de Eva. Todos sabemos las consecuencias.
Llevemos cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo.
Nuestra autoestima y nuestro diálogo interno deben ser sanados por Cristo y decir de nosotros lo que la palabra De Dios dice de nosotros.
2. El poder de la palabra
Profetiza…. Vr.4
Las palabras humanas tienen un poder creativo, sanador o destructivo y mortal. Todo depende como las usemos.
Profetizar es hablar palabras humanas bajo la unción y dirección divina.
Bendecid y no maldecid; es la instrucción apostólica.
La palabra justa, sabía, bien dirigida y mesurada puede por si sola generar mucha bendición. Pero la palabra profética rompe moldes y genera vida.
3. El poder de la palabra De Dios
Así ha dicho Jehová. Vr.5
“La palabra profética más segura” la Biblia con sus mandamientos, sabiduría, promesas e instrucciones es nuestra lámpara que alumbra en lugar oscuro.
Somos el pueblo del libro y por lo tanto escudriñamos cada día. Pues allí encontramos dirección, estrategia, alimento y luz para continuar el camino con certeza.
La Biblia es la palabra De Dios. Nosotros aprobamos lo que ella aprueba y rechazamos lo que ella prohíbe.
4. El poder del Espíritu.
Yo hago entrar espíritu en vosotros y viviréis. Vr.5
Nada cobrará vida sin el poder del espíritu.
El que cree en mi como dice la escritura, de su interior correrán Rios de agua viva.
El Espíritu viene sobre todo lo que esta seco, inerte, paralizado y sin fuerza para hacerle vivir.
Espíritu De Dios sopla d los cuatro vientos de la tierra y produce vida sobre esos huesos secos.
Conclusión
Piensa bien, habla bien, conforme a la Biblia e invita al Espíritu De Dios sobre todos tus proyectos, metas, familia y finanzas. Dios tiene el poder de hacer que cada hueso se junte con su hueso, de poner carne nervios y tendones donde no los haya, su Espíritu es especialista en dar vida.
Lo demás es lo de menos